Los peligros del bruxismo
El bruxismo es un problema dental común, pero a menudo desconocido, que puede tener un impacto significativo en la salud y el bienestar de una persona. El bruxismo se define como una contracción y apertura de la mandíbula involuntaria que causa el rechinamiento de los dientes.
Aunque puede tener lugar durante el día, el bruxismo generalmente se produce durante el sueño, cuando el paciente no es consciente de su comportamiento. Los síntomas pueden incluir dolor de cabeza crónico, dolor en la mandíbula y en los oídos, sensibilidad dental y dolor muscular. Además, el bruxismo puede causar desgaste excesivo de los dientes, lo que puede conducir a una variedad de problemas dentales, como caries y fracturas.
Los factores que contribuyen al bruxismo pueden incluir el estrés, el consumo de alcohol, el tabaquismo, la apnea del sueño, los trastornos emocionales y algunos medicamentos. También la ansiedad, el estrés psicológico, el trastorno bipolar, el trastorno de ansiedad generalizada y algunos trastornos alimenticios.
El tratamiento puede incluir la modificación de la conducta, el tratamiento farmacológico, la terapia cognitivo-conductual y la terapia de relajación. Los tratamientos no farmacológicos pueden incluir la modificación de la actividad física, la reducción del estrés y la terapia de relajación. Además, existen varios dispositivos orales diseñados para ayudar a prevenir el bruxismo.
Estos dispositivos, llamados protectores bucales, cubren los dientes y evitan que los dientes se rechinen durante el sueño. El bruxismo es un problema dental común que puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar. Al presentarse algún síntoma, es importante acudir al dentista para recibir el diagnóstico y tratamiento adecuados. El tratamiento temprano puede ayudar a prevenir daños mayores a los dientes y a la mandíbula.
Debido a que puedes tener bruxismo nocturno y no ser consciente de eso hasta que se manifiesten las complicaciones, es importante conocer los signos y síntomas del bruxismo, pero sobretodo recibir atención odontológica regular para detectarlo oportunamente.